Vol. 5 ¿Qué es una tela y dónde se pueden apreciar?
Constantemente estamos rodeados de textiles en nuestro día a día y no somos conscientes de ello. Pero si reflexionas, notarás que desde que empieza el día hasta que duermes estamos utilizándolos, ya sea en la vestimenta, a la hora de dormir con unas sábanas, de bañarse con una esponja y secarse con la toalla. Igualmente cuando manejas un coche o una moto en las llantas y en el interior del coche, éstos están presentes. También en los interiores de una casa, oficina, restaurante, etc. Es más, incluso en el arte, la ciencia y tecnología hay textiles.
Una tela puede definirse como una estructura plana con suficiente flexibilidad para transformarse en uso doméstico como decoración de interiores, un mueble, uso industrial o ropa. Por lo general el nombre de una tela se determina en el proceso de fabricación.
Ésta se puede hacer a partir de soluciones, fibras, hilos o la combinación de las mencionadas anteriormente. Además el costo varía dependiendo del número de etapas que intervienen y la rapidez con la que se hace. Entre menos etapas y más rápida sea su fabricación el costo será menor y viceversa.
Las telas se clasifican en cuatro categorías principales. Soluciones, fibras, hilos y compuestas, ya sean no separables o de componentes múltiples.
Las soluciones se elaboran a partir de químicos o polvos. Éstos pasan a presión con aire caliente y después se depositan en un cilindro. Los textiles más comunes a base de soluciones son las películas, el hule, poliuretano o el polietileno. También se encuentran dentro de esta categoría las espumas, las cuales se elaboran introduciendo aire en una sustancia elástica.
Probablemente los has visto en empaques, embalajes, cubiertas, en mallas antiderrapantes o en el relleno de tus muebles y colchones.
Lo que los caracteriza es que tienen un costo bajo, son a prueba de agua, resisten la suciedad, no son fibrosas, tienen mala permeabilidad y mala caída.
Ilustración 1: rollo de películas
Ilustración 2: relleno de mueble
Ilustración 3: espuma de empaque
Las telas a base de fibras como el fieltro o el paño, por lo general son de lana o poliéster cardado, peinadas en forma de lámina gruesa. Éste pasa por un proceso en el que se les rocía agua, luego entran por unas placas calientes que se agitan y se enredan.
Se caracterizan por no tener grano, no se deshilacha, ni rasga, absorbe el sonido, no es flexible, ni respirable y tampoco se alarga.
Las puedes encontrar en paneles acústicos, muebles, tapetes, paredes e incluso en muchos muñecos y peluches.
Ilustración 4: fieltro
Ilustración 5: paño
Las telas a base de hilos son bastante amplias debido a que dependiendo de la técnica o el tipo de tejido es el área donde se encuentran. Por ejemplo el entretejido o la trencilla son telas angostas en forma circular que se encuentran en listones o agujetas para calzado.
Ilustración 6: agujeta
También está el encaje, hilos anulados y entrelazados entre sí que generan telas abiertas con figuras. Igualmente se encuentran las de tejido plano, hilos entrelazados de manera perpendicular, como un jacquard, una tela estructurada, pana, terciopelo o una toalla. Éstas son sencillas de identificar y tienen características particulares tales como mayor textura, aspecto, son rígidas y tienen grano. Sin embargo, no se estiran mucho y son fáciles de destejer de los orillos.
Precisamente en FORMATEX contamos con un amplio catálogo de este tipo de telas utilizadas principalmente en tapicería y cortinas. Asimismo esta categoría se usa mucho para la mantelería, ropa de cama toallas.
Ilustración 7: tela estructurada
Ilustración 8: tela toalla
A diferencia de este tejido, el de punto son uno o varios hilos en forma de bucle o malla que se entrelazan. Son mucho menos rígidos, se teje más rápido, son elásticos, porosos, resistentes y se elaboran en máquinas rectilíneas o circulares.
Se utilizan para accesorios, ropa o cojines.
La última categoría son las telas compuestas, conformadas por dos telas o varios componentes unidos en uno mismo.
Se mencionó al principio que dentro de esta división se encuentran dos tipos diferentes, las no separables y las de componentes múltiples.
Las no separables, como el mismo nombre lo dice es imposible separarlas. Su proceso de producción consiste en mezclar y juntar varias fibras, procesos y materiales para obtener dos telas unidas en una sola.
Las imitaciones de piel, gamuzas, terciopelos sintéticos o forros son ejemplos claros de este tipo de telas, ya que al verla por el frente puedes notar la textura, el dibujo y color de la tela, pero al girarla notarás que la parte de atrás tiene otro aspecto distinto, ya sea soluciones de poliuretano, nudos, tela aterciopelada o el famoso backing, una tela blanca, estructurada y rígida que brinda soporte, espesor, calidad, rigidez y fuerza a ésta.
Ilustración 9: Imitación cuero
Ilustración 10:backing
En cambio las de varios componentes consiste en telas que se pegan entre sí por medio de un adhesivo como la entretela o backing. Otra opción puede ser el proceso de espuma y flamas como los acolchados de las chamarras o edredones. Además de dar cuerpo y forma a la tela por un menor costo, también brindan calor y protección.
Ilustración 11:Backing
Después de leer esta información, cuéntanos ¿Cuáles y cuántas has podido identificar en casa?
Autor | Jimena Chávez
"Dicha información es únicamente de referencia, para obtener detalles precisos sobre el uso, cualidades y cuidado de nuestros productos, es necesario consultar directamente con tu vendedor antes de realizar una compra o recibir recomendaciones."